Honesto Abe, estamos felices de que estés a salvo

Abe había estado desaparecido durante casi dos semanas. La dueña de Abe, Peggy Gilbert, estaba perdiendo la esperanza de que su perro ganadero australiano de 15 años regresara a casa. La familia se había mudado recientemente al vecindario y Abe era sordo, casi ciego y cojeaba debido a problemas de cadera.

Gracias a un par de linieros de PUD, Abe no solo fue encontrado, sino que estaba vivo. Después de que los capataces de línea Ray Snider y el oficial de líneas Steve Ingrum tropezaran con el perro viejo atrapado en el fondo de un agujero, Abe se reunió con Peggy la semana pasada en su casa en Arlington.

“Cuando abrí la parte trasera de la camioneta, ella miró al perro y gritó '¡Abe!' y rompí a llorar ”, dijo Val Copeland, oficial de apoyo policial de la ciudad de Arlington. "Un cliente más muy feliz con un fabuloso esfuerzo en equipo".

Encontrar a Abe fue un esfuerzo de equipo definitivo. Ray y Steve estaban buscando un trabajo de reemplazo de poste en lo profundo de la maleza de la 67th Ave. en Arlington. Después de caminar por una pendiente empinada y atravesar algunos bosques, los linieros se toparon con un agujero en un pequeño claro. Abe estaba sentado en el fondo del agujero.

Ray y Steve metieron una escalera en el agujero y bajaron para llevarle un poco de agua al perro, que parecía viejo y débil. Llamaron a la policía de Arlington e informaron su hallazgo. Después de responder a la escena, la policía llamó al departamento de bomberos y el bombero Al Chamberlin se subió al agujero y sacó a Abe.

Luego, Copeland verificó cualquier identificación del perro, incluido un chip de identificación. No encontró ninguno. Al prepararse para llevar al perro al refugio, Copeland recibió una llamada del voluntario de la policía Kim Casteel. Al investigar un poco en las redes sociales, Kim descubrió una publicación de una mujer de Arlington que tenía un perro perdido.

Copeland llamó a la persona que finalmente resultó ser Gilbert y describió al perro. Gilbert estaba asombrado de que Abe estuviera vivo. Una hora más tarde se reunieron.

"Gracias a todos los que estaban cuidando a mi viejo perro", escribió Gilbert en Facebook. “Está en casa, faltan 12 días… Está muy confundido en este momento y muy cansado. Una vez más, no puedo expresar lo agradecido que estoy con las personas que lo encontraron y lo sacaron de ese pozo ".

El rescate de Abe es un gran ejemplo de que nunca se sabe lo que va a encontrar en el trabajo, que para los linieros puede estar en algunas áreas apartadas. Es seguro decir que si los linieros de PUD no se hubieran aventurado a regresar a esa área remota, Abe nunca habría sido encontrado. El poste que la cuadrilla iba a reemplazar no había sido revisado en años y estaba listo para ser reemplazado durante una revisión de mantenimiento programada.

Un equipo de PUD regresó al día siguiente para llenar el agujero y evitar que cayera otro animal. ¡Buen trabajo, Ray y Steve!